...la Biblia de Jerusalén
I Juan 2, 1-5
1 Hijos míos, os escribo esto para que no pequéis. Pero si alguno peca,
tenemos a uno que abogue ante el Padre: a Jesucristo, el Justo.
2 El es víctima de propiciación por nuestros pecados, no sólo por los
nuestros, sino también por los del mundo entero.
3 En esto sabemos que le conocemos: en que guardamos sus
mandamientos.
4 Quien dice: «Yo le conozco» y no guarda sus mandamientos es un
mentiroso y la verdad no está en él.
5 Pero quien guarda su Palabra, ciertamente en él el amor de Dios ha
llegado a su plenitud. En esto conocemos que estamos en él.